La Tierra de Tar
Las noches de invierno son frías y húmedas y nevadas, y amedrentan al hombre a internarse en el vecino bosque. Es tupido y húmedo y...
Las noches de invierno son frías y húmedas y nevadas, y amedrentan al hombre a internarse en el vecino bosque. Es tupido y húmedo y oscuro, y sus árboles son viejos y duros, y sus arbustos espinosos y altos. Es fácil perderse en él de día. En la noche, las raíces y ramas rotas se convierten en trampas, que bien pueden despeñar al excursionista por un terraplén o por una quebrada. Cuando me despierto en la buhardilla de la antigua casa de campo de mi bisabuelo, la luna menguante ilumina las copas de los viejos alcornoques y robles, y el...